Que tiernas somos!
Si vivieras en el cielo, no importa morirme para conocerte.
Si la vida me diera un deseo, desearía volver a conocerte.
¿Cómo quieres que te olvide, si cuando quiero olvidarte, me olvido del olvido y comienzo a recordarte?
Si quieres lastimarme no lo hagas con un puñal...sólo dime que no me quieres, y la herida será mortal
¿ Crees en el amor a primera vista o tengo que volver a pasar delante tuyo ?
Eres justo la medicina que me recetó el médico para curar el el dolor de mi corazón.
!Què bella entrada! Estimada Miuris, dulces ocurrencias engalanan un gran poema. !La foto es fantàstica!
ResponderEliminarUn abrazo desde Mendoza y buenas noches!
Buen día Mariela, que bueno que te guste la tierna escena de la mamá Dálmata con su cara de apuro, cual será la explicación que dará a su sorprendido maridito?
ResponderEliminarUn saludo de finde, que lo pases divino!