Hay un hondo quejido de la noche,
que te llama, te busca
y no respondes.
Hay un dolor callado en las estrellas,
que apagaron su luz,
porque no estás.
El viento en un gemido,
pronuncia tu nombre
y su grito se pierde en un eco.
Esta noche la luna,
opacada entre nubes,
se ha negado a brillar,
porque no estás conmigo.
Y mi alma escondida bajo un manto de sombra,
suspendida en la niebla de una medianoche,
te seguirá esperando.
dulce sentir... donde estaras ... un corazon que aclama su llegada ese que espera por ese toque de magia que llene nuestros dias al amor--- lindo poema con muy claro sentir ..lindo amiga
ResponderEliminarabrazos
linda semana
saludos
Precioso poema en toda la ausencia del ser amado; en toda su expresiva tristeza.
ResponderEliminarUn gusto leerte, querida Miuris.
Cordiales saludos
Bello poema Miuris,ese dolor callado me recuerda un dolor callado,que ya no está conmigo...gracias amiga un abrazo grande que tengas un lindo dia..
ResponderEliminarNecesidad apremiante y dulce espera, gracias poeta por su paso por estas vendimias.
ResponderEliminarUn abrazo
Mi gratitud y afecto para ti Mariela, me encanta recibir tus letras inspiradas.
ResponderEliminarEntrañable abrazo
Dolor callado que se siente y se contiene, solo estalla ante la intrepidez de las manos que teclean sin pedir permiso al cozaón.
ResponderEliminarGracias Carmen querida.
Que pases una buena tarde, abrazos.