A sus cuarenta y dos años como artífice de la moda, rechaza la posibilidad de retirarse, me parece perfecto, y que es como el buen vino, su calidad radica en la excelencia de la mejor cosecha, y faltan a este hombre todavía, muchas páginas por llenar.
“Seguiré adelante mientras tenga la misma pasión a la hora de trabajar y mientras mi trabajo cuente con la misma aceptación de ahora”. Si a tomar en cuenta esa condición se atiene su retirada de la moda, tendremos Oscar por muchos años, porque sus modelos son cada día más apetecidos.
Diez y ocho años tenía, cuando las costas dominicanas le vieron partir hacia Madrid, su equipaje de sueños le llevaba a la Academia San Fernando, con la idea de estudiar pintura, atrás quedaba el terruño, ese que llevamos siempre en el corazón.
Una cosa es la que forja la mente, otra diferente es la senda por la cual nos lleva la vida, en Madrid empezó a surgir el interés por el diseño de moda, haciendo sus primeros esbozos para casas españolas de moda.
Cristóbal Balenciaga, el reputado modisto español, fue con quien donde primero trabajó el dominicano, experta tijera y excelente maestro, con semejante inicio, no habría un solo umbral que no se atreviese a traspasar. Pasaría luego a integrar el staff de los más reconocidos protagonistas Del mundo de la alta costura.
Aún le quedaba París, sus alas se extendieron hasta allí porque es evidente que quien pretenda tener un nombre dentro del cualquier renglón, llámese arte o costura, no puede obviar irradiarse con el fulgor dela ciudad Luz.
La Casa Lavin, afamadamente reconocida, fue la gran escuela, “quien tenga ojos para ver, que vea”, nuestro Oscar abrió desmesuradamente los suyos y haciendo de su materia gris un disco duro, almacenó experiencias, dando cátedras con su estilo, que desde sus inicios se caracterizó por su elegancia.
Corrían los años, Nueva York le aguardaba y marchó a la gran Manzana en 1963. Era ya un astro reconocido dentro del mundo de la moda y en Nueva York le esperaba otra estrella junto a la cual se intensificó su brillo, Elizabeth Arden para la cual diseñó una colección.
A sus afamados diseños de ropa fue agregando renglones, perfumes, complementos, accesorios para el hogar, ropa para hombres.
No cabe dudas, Oscar de la Renta es un dominicano de éxito.
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¡Seguro que Oscar de la Renta es dominicano? Estaba seguro de que ese diseñador era de nacionalidad mejicana.
ResponderEliminarInvestigaré a ver si estoy equivocado