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miércoles, 24 de marzo de 2010

Alameda de Hércules

Es un jardín, un museo, un teatro, una escuela, es la conjunción de la historia con la actualidad.

El lugar donde jóvenes y adultos maduros, encuentran un destino alejado del mundanal ruido y apegado cada uno a su predilección, allí se cocina poesía, se embebe la música y camina la inspiración tocando hasta a los tímidos que nunca se atrevieron en otro ambiente a leer un poema, lo hacen en este hábitat natural de los artistas.

Situada en el centro histórico de Sevilla, la Alameda de Hércules, cuya creación data del año 1574, puede ser considerado como el jardín público mas antiguo de Europa, está ubicado en el extremo Norte de la ciudad amurallada.

Cercano al Guadalquivir, el majestuoso Río Grande, hace que se bañe en sus noches cálidas, del frescor de su brisa, podría jurar que en este adorable vergel, durante la noche, otea Hércules, cubierto por las ramas de los árboles, atrapando estrellas para que iluminen su espacio.

Previo a la creación de la Alameda, la zona era un cenagal, que en tiempos de lluvia se llenaba de agua, con las secuelas consecuentes. Fue Don Francisco Zapata, Conde de Barajas, quien decidió buscar la solución adecuada a situación tan calamitosa. Es tal vez, la obra urbanística mas destacada de la Sevilla del siglo XVI.

Fue el despertar de la zona, empezaron a ensancharse los álamos, se crearon tres avenidas adornadas con fuentes, colocándose además dos columnas sobre cuyo pedestal se destacaban el legendario Hércules, fundador de Sevilla y Julio César, excelente compañía, para una no menos excelente obra.

Siglos después, se colocaron las dos columnas del lado Norte, rematadas con leones de piedra, portando los escudos de España y Sevilla.

Ya no se escucha el rumor cantarino de las fuentes, ni reverdecen las hileras de álamo que dieron nombre al amplio oasis, continúan majestuosas sin embargo, las cuatro columnas, tal vez simbolizando la fuerza de Hércules.

Se encuentra en la Alameda, la Casa de las Sirenas, un palacete convertido hoy en Centro Cívico, es además la morada perfecta para reuniones de escritores y poetas. También en sus cercanías, se encuentra la casa donde nació Gustavo Adolfo Béquer, el poeta sevillano romántico por excelencia.

La Alameda fue remodelada en 2008 y como sucede siempre en estos casos, las remodelaciones tienden a desmitificar el encanto, pero a esta Alameda, la avala su solera, es muy Alameda, de la misma manera que Sevilla es muy Sevilla, como para permitir que fuese dañado uno de sus emblemas.

Para caminar por la noche respirando el olor de los azahares que le circundan, para dejar volar el espíritu entre poesía, arte y música, o simplemente para sentirse bohemio disfrutar del ambiente nocturnod e Sevilla, la Alameda de Hércules es un lugar perfecto.

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