Tenaz, tras la huella de un sueño,
incansable, pertinaz como una lluvia fina,
obstinada como el toro de lidia,
sublime como un rayo de luna.
Insufrible como un dolor profundo,
cristalino como una carcajada,
remedo alegre de la felicidad,
es el grito que se ahoga tan adentro,
hondo alarido que pide redención,
gemido inconfundible que viene y va
agobiado de plenitud de angustia.
Las letras, las palabras y las rimas,
ResponderEliminaren tu pluma deliciosa se deslizan,
tu si, muchacha, que cautivas
y dejas al alma conmovida!
Una joya es tu poema amiga
Recibe mi beso en Sevilla!
Federico
Muchas gracias, caballero de palabra poética, gracias del alma por tus palabras.
ResponderEliminarUn abrazo con melodía de tango hasta Buenos Aires
Sonido de palabras como campanas en tan elegidas letras.
ResponderEliminarUn abrazo