El pueblo por si mismo es una atracción, enclavado en la sierra, Zuheros une al encanto de los pueblos blancos, su arquitectura medieval de un estilo atrayente. Pequeño y rebosante de interés histórico, caminar por sus calles es una experiencia gratificante, subir la estrecha pendiente que lleva a su viejo castillo sintiendo en la cara el viento serrano, transporta al paraíso.
Romanos, musulmanes fueron sus amos hasta el siglo XIII cuando los cristianos al mando de Fernando III el Santo lo rescató, pasando a ser heredad de la Casa Aguilar.
Amante de sus tradiciones, sus fiestas forman parte del patrimonio cultural de este maravilloso pueblo de la provincia de Córdoba.
Las actividades en el Parque Natural de las Sierras Sub béticas , cueva de los murciélagos, miradores, Museo Arqueológico, Museo de Artes y Costumbres Populares “Juan Fernández Cruz” , Estudio del Pintor Francisco Poyato y sus pintorescos alojamientos convierten a este pueblo en uno de los más atrayentes de Andalucía.
Hacer un recorrido por Zhueros, es como adentrarse a la Edad Media, bien colocados en cualquiera de sus miradores, se divisan unas vistas que parecen salir de una película y nos envuelven en un mundo de magia.
Es casi el cielo, un atardecer mirando el declinar del sol, sintiendo como un roce la caricia del viento para refugiarse en una terraza a tomar un café caliente, o un chocolate, una experiencia que emociona los sentidos y entibia el alma.
Conozco la zona, Miuris, he estado en varias ocasiones alojado en la Sierra Subbética y siempre volví encantado de su gente, sus paisajes llenos de senderos por lo que caminar sin prisa, y sus pueblos. Además de Zuheros, merece la pena conocer Priego de Córdoba, Cabra, Luque, Alcalá las Real. En fin, un encanto para disfrutar con los cinco sentidos.
ResponderEliminarUn abrazo