Tras de mi, la noche,
la luna me seguía
y temerosa,
mis ojos de ella, no se desprendían.
Me irradiaba su luz
y yo quise pensar que
ya las noches negras habían terminado.
Así como maduran las uvas, caen mis letras plasmando la esencia de mi verdad más profunda. Empecé a soñar donde el cactus es una piedra más del camino y reverbera el sol, donde la noche se irradia de estrellas que se reflejan sobre la blancura de los jazmines que pueblan mis recuerdos. Soy un latido de una ciudad que es un corazón. Dos cielos me cubren, el propio y el de Sevilla, ciudad pasión y melodía.
amiga miuris como siempre sus poesia llenas de sentimiento y emocion a flor de piel...
ResponderEliminarlindo poema
saludos
linda semana
abrazos
Hermoso es visitarte Miuris. Te dejo un abrazo amiga.
ResponderEliminarMi gran amiga, que alegría tenerte por aquí. Hermoso poema, ¡y nostálgico! Un fuerte abrazo queridísima Miuris
ResponderEliminarHola Mauri, me alegra que te guste tanto mi tierra, pues paso por tu blogg, todos los dias, por ver tus poemas y por ver lo vien que hablas de mi querida Andalucia, que yo la llevo incrustada en mi piel. Gracias y que este nuevo año te colme Dios de vendiciones. Que tengas un lindo dia.
ResponderEliminarPoeta del Cielo, sus palabras siempre hacen subir la moral, gracias.
ResponderEliminarUn cordialsaludo
Mi querida Mariela, cuantos días sin comunicarnos, gracias por volver a estas Vendimias, tu casa.
ResponderEliminarUn abrazo
Mi querida Isota, te aseguro que esa amistad que me brindas la agradezco y correspondo en la misma medida.
ResponderEliminarGracias amiga, un abrazote de Sevilla a Canarias.
Mi amigo Rafael, que pena que no puedas estar en tu tierra, pero tienes la mía que te brinda todo su calor y hospitalidad.
ResponderEliminarPues si, estoy en tu Andalucía y me siento muy bien aquí, ojalá que un día pudiésemos caminar entre naranjos y así de paso me contarías algunas anécdotas de tu pueblo.
Felicidades querido amigo, un abrazo cordial.